La Remanufactura de Motores y el Medio Ambiente
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Inherentemente, la remanufactura tiene un extraordinario impacto en el medio ambiente. De hecho, muchas empresas utilizan hoy en día el concepto de la remanufactura, o emplean este término en su literatura ambiental. La postura de la Sociedad Americana De Ingenieros Mecánicos (American Society of Mechanical Engineers) en la publicación “Diseñando Para El Medio Ambiente” (“Designing for the Environment”), incluye el concepto de la remanufactura. De igual forma, la Asociación Americana de Fabricantes de Automóviles (American Automobile Manufacturers Association) en su reporte “Hechos Principales de las Empresas de Automóviles en los Estados Unidos: El Medio Ambiente” (“Key Facts About America’s Car Companies: The Environment”), incluye a la remanufactura como parte del ciclo de vida de un automóvil.
La remanufactura es la forma suprema de reciclaje.
El término “reciclaje” generalmente se aplica a bienes de consumo tales como papel periódico, botellas de vidrio y latas de aluminio. Sin embargo, el reciclaje también se puede aplicar a bienes de consumo duradero, como son los motores. Una vez que la vida útil de un bien se termina, si éste se recicla evitamos que pase a formar parte de la enorme cantidad de desperdicios. En su lugar, lo que pudo ser basura se convierte a su estado original de materia prima y se utiliza en un nuevo proceso de manufactura. Los beneficios al medio ambiente derivados del reciclaje son fáciles de comprender: el reciclaje reduce de forma considerable la cantidad de basura que se genera día a día y otorga vida múltiple a las materias primas que nos ofrece nuestro planeta. De ahí que la remanufactura sea considerada la forma suprema de reciclaje.
No obstante, la remanufactura ofrece todavía mejores alternativas que el reciclaje. Según anotaciones del profesor Lund de la Universidad de Boston en su libro “La Ventaja Americana: Aprovechando los Beneficios Ocultos de la Manufactura” (“The American Edge: Leveraging Manufacturing’s Hidden Assets”), la remanufactura difiere del reciclaje porque al remanufacturar se recicla no solamente la materia prima sino además el valor agregado que se ha dado a la materia prima original. Según el doctor Lund, “La remanufactura difiere del reciclaje principalmente porque, por unidad de producto, realiza una contribución mucho más grande a la economía que la que hace el reciclaje. La diferencia esencial se origina en la recuperación del valor agregado”.
La remanufactura recupera el valor agregado al producto en su fabricación original. De hecho, un estudio del Instituto Tecnológico de Massachussets realizado en 1981 acerca de la remanufactura de componentes automotrices, indica que aproximadamente el 85% de la energía utilizada en la fabricación del producto original, se preserva en el producto remanufacturado. Por ello se considera a la remanufactura como la forma suprema de reciclaje.
Otros beneficios al medio ambiente en la remanufactura.
De acuerdo con estudios realizados en el Instituto Fraunhofer en Stuttgartt, Alemania, el ahorro anual de energía originado por la remanufactura mundial, equivale a la electricidad generada por 5 plantas de energía nuclear, o a 10,744,000 barriles de petróleo crudo, una flotilla de 233 pipas llenas. El Instituto Fraunhofer determinó además que el ahorro en materias primas a escala mundial, gracias a los procesos de remanufactura, llenaría 155,000 carros de ferrocarril que formarían un tren de 1,100 millas de longitud.
Como los productos que han sido remanufacturados se mantienen alejados del desperdicio por más tiempo, se preserva la tierra destinada para ello y se reduce la contaminación del aire gracias a la utilización de productos que no tuvieron que sufrir procesos de fundición, forjado u otros procesos para ser reutilizados. Un producto siempre puede reciclarse. Pero extender la vida de un producto a través de la remanufactura es la clave para preservar los recursos naturales de la tierra.